Ingredientes:
- Bock choy: 1 planta
- Hongos shitake frescos: 6-8 u.
- Puerro: 2 tallitos (la parte verde)
- Cebolla de verdeo: 2 tallos (parte verde)
- Ajo: 1 diente
- Salsa de soa: 1 cda./ Aceite de oliva: 1 cdita.
- Quínoa blanca: ½ taza previamente remojada por 4 hs y enjuagada
- Maní tostado s/sal: 2 cdas.
- Sal y pimienta: a gusto.
- Perejil fresco: 1 puñadito.
Procedimiento:
Poner a cocinar la quínoa lavada con 2 tazas de agua. Lavar el bok choy y cortarlo en rodajas. Lavar los tallos de puerro y verdeo y cortar fino. Pelar el ajo, abrirlo al medio para quitar la raíz, y luego filetearlo. Reservar. Cortar en láminas gruesas los hongos. Pintar con aceite de oliva una sartén antiadherente y llevar a fuego medio, añadiendo el bock choy, puerro, verdeo y ajo con pizca de sal. Saltearlo unos minutos y dejar tapado 5 minutos para que largue su jugo. Subir el fuego y añadir los hongos, el maní y la salsa de soja, removiendo para una cocción breve y fuerte. Aparte comprobar la cocción de la quínoa, que deberá abrirse en aritos, y estar blanda. Escurrir el agua sobrante. Picar el perejil finamente. Presentar el plato con 3-4 cdas de quínoa con perejil por encima a un lado y la otra mitad del plato con la mezcla tibia de hongos y bock choy. Compartir y disfrutar!